Oleg Georgievich
La Unión Soviética fue derrotada desde adentro a través de la colusión y la traición. Conocemos los nombres de sus ganadores. ¿Debemos y tenemos derecho a condenarlos? Creo que sí. Estoy seguro de que no había requisitos previos objetivos para esto. Por la integridad del estado era necesario luchar hasta el final.
Durante muchos años me he estado preguntando cómo y por qué la antigua casa común llamada URSS se convirtió en un apartamento comunal en el que los vecinos no se llevan bien entre sí.
El guión ya está escrito.
Las comunidades unidas por ideas comunes o fronteras estatales viven y se desarrollan de acuerdo con sus propias leyes, y los intereses del principio unificador no armonizan necesariamente con los intereses del pueblo mismo. El estado como un sistema jerárquico complejo de varios niveles tiende a la inmortalidad mientras todos sus miembros son mortales. Y esta es una analogía directa con un organismo vivo. Por lo tanto, por analogía con el destino de una persona, es apropiado hablar sobre el destino del estado, la libertad de elección y la capacidad de influir en el destino.
El destino de una persona o de un país es un guión que ya ha sido escrito en alguna parte y por alguien. La puesta en escena o el curso específico de un hecho histórico se crean en el transcurso de la representación, son el resultado del libre albedrío en las circunstancias propuestas. Además, en cada caso concreto, la voluntad se reduce a la elección del «SÍ» o del «NO».
La libertad de elección que se nos otorga a cada uno de nosotros por nacimiento solo es posible en este formato.
En cuanto a los procesos históricos globales, la mente cósmica, al ser guionista y directora de la obra de teatro denominada «Evolución del destino», selecciona por sí sola a los intérpretes de los papeles principales, guiada por el principio fundamental del universo, que se puede definir como el principio de «Atracción de Energías Cercanas».
El colapso de la Unión Soviética se produjo porque las prioridades políticas y los intereses momentáneos de Rusia, como principio unificador de la URSS, no armonizaron con los intereses de las repúblicas de la unión.
Anteriormente escribí que los ciclos de evolución social en Rusia son múltiplos de 40 años y que el colapso de la Unión Soviética y la ideología comunista era una conclusión inevitable y comenzó en 1985 con la llegada al poder de Gorbachov. Escribió que los ideales del comunismo eran atractivos para las personas, pero no se materializaron debido a la inflexibilidad de los postulados ideológicos, la falta de voluntad para corregir el modelo económico de gestión, la violación de los principios de retroalimentación entre el principio rector y rector y el objeto de la gestión. . En lugar de la introspección, la hipocresía y el «mentir para siempre» se han vuelto habituales.
En el contexto de los acontecimientos actuales, debe enfatizarse que desde el punto de vista de la Razón Cósmica, el destino de los pueblos eslavos de Ucrania, Bielorrusia y Rusia son inseparables, aunque cada uno de ellos pasa por un ciclo de evolución de 40 años. En maneras diferentes.
Volvamos a 1985. La influencia del líder del país sobre su pueblo puede compararse con la influencia de la reina sobre un enjambre de abejas.
En la estructura de la abeja, la reina es la líder. La salud de todo el enjambre depende de su salud y del nivel de energía interna.
Cuando la reina de un enjambre de abejas se enferma o envejece, la familia de abejas se degrada y disminuye, sus números se restauran después de reemplazar a la reina por una joven y saludable. De acuerdo con las leyes de los sistemas líderes, es necesario un cambio oportuno y periódico de líderes para el desarrollo sostenible del sistema.
«Escuadrón Funerario»
Mijaíl Gorbachov
Para 1985, la otrora poderosa energía de la URSS se debilitó significativamente por el hecho de que el país estaba encabezado por el moribundo Chernenko, el país estaba dirigido por personas enfermas y ancianas.
Entre ellos había uno, relativamente joven y enérgico: Mikhail Gorbachev : un arribista y proyector del partido provincial; retórico leal y devoto.
Tal persona estaba destinada a convertirse en una figura clave en el período más importante del comienzo del ciclo de 40 años de Rusia.
El vector inicial de movimiento y su energía dependían en gran medida de él.
No es en vano que la gente diga: «Dios marca al pícaro». Marcado visualmente por el Creador, Mikhail Sergeevich cumplió la misión histórica que se le encomendó como sepulturero de la ideología comunista y el colapso del otrora poderoso imperio comunista.
¡Fue él quien cambió Alemania Oriental por el Premio Nobel de la Paz! ¡Fue él quien traicionó al partido del que era líder!
El gran Guionista y Director puso en primer plano a Boris Yeltsin : arribista del partido, intrigante experimentado, retórico y proyector; líder impulsivo, hambriento de poder y carismático que sufre de adicción al alcohol. Habiendo logrado todo gracias al Partido Comunista, renunció fácilmente a sus creencias partidistas y posteriormente prohibió el Partido Comunista.
Un constructor por educación, Boris Yeltsin fue un destructor en esencia. A su alrededor se formó un círculo de personas de confianza, en el que su compatriota Gennady Burbulis , ex profesor asistente de materialismo dialéctico y filosofía marxista-leninista en el Instituto Politécnico de Sverdlovsk , fue elegido para el papel de «eminencia gris» .
Y para el papel de un experto en el campo del derecho inconstitucional, se seleccionó al ex jefe del laboratorio de informática legal de la facultad de la Universidad Estatal de Moscú que lleva el nombre de M. V. Lomonosov Sergey Shakhrai .
La palabra «Shakhrai» se traduce del ucraniano como estafador o estafador. Ni sumar ni restar…
Se seleccionaron candidatos bastante adecuados para el papel de líderes de Ucrania y Bielorrusia.
El primer presidente de Ucrania, Leonid Kravchuk , es originario de Ucrania occidental. Funcionario experimentado del partido, miembro del Comité Central del PCUS, conocía bien a Yeltsin.
Tres días después del fracaso del golpe del 19 al 21 de agosto de 1991, abandonó el partido y, como presidente del Soviet Supremo de la RSS de Ucrania, aprobó una ley sobre la independencia de Ucrania.
En noviembre del mismo año afirmó que el Tratado de Unión propuesto por Gorbachov no tenía perspectivas y se negó a firmarlo, pero en diciembre firmó el Acuerdo Belovezhskaya, a pesar de que en el referéndum del 17 de marzo de 1991 la mayoría absoluta de la población de Ucrania expresó su deseo de seguir siendo parte de la URSS.
En cuanto a Stanislav Shushkevich , físico, miembro correspondiente de la Academia de Ciencias de la BSSR, asumió el cargo de presidente del parlamento, al parecer, por accidente.
Como vicepresidente del Consejo Supremo, él, junto con el líder de la oposición Poznyak, inició la renuncia del presidente del parlamento y su jefe Dementei, quien apoyaba al Comité de Emergencia del Estado. ¡Así fue como el Gran Guionista y Director reunió al equipo funerario de la URSS, que en dos días enterró lo que se había creado y construido durante 70 años!
La Unión Soviética fue derrotada desde adentro a través de la colusión y la traición. Conocemos los nombres de sus ganadores.
¿Debemos y tenemos derecho a condenarlos? Creo que sí. Estoy seguro de que no había requisitos previos objetivos para esto. Por la integridad del estado era necesario luchar hasta el final.
«Golpe pacífico»
boris yeltsin
La liquidación del gran país tuvo lugar tranquilamente en el séptimo año del ciclo de 40 años de la nueva historia de los estados eslavos, o en la tercera ronda de la espiral del tiempo que se desarrolla.
La conspiración para colapsar la Unión Soviética fue organizada por Yeltsin, impulsado por una sed de poder ilimitado y venganza contra Gorbachov, ignorando la voluntad de los pueblos de las repúblicas eslavas de preservar la integridad del país.
A su regreso a Moscú, Yeltsin no se dirigió a la nación, pero primero llamó al presidente de los Estados Unidos e informó, por así decirlo, de la situación política.
Estados Unidos, como principal ideólogo del colapso del imperio soviético, recibió de Yeltsin un regalo con el que solo podían soñar. Veinte años después, en una entrevista con Radio Liberty, el primer presidente de Ucrania, Leonid Kravchuk, admite que “la firma del acuerdo de Bialowieza fue un golpe de Estado realizado pacíficamente”.
Propongo perpetuar la historia de la traición del primer presidente de Rusia, B. Yeltsin, colocando en el Centro Yeltsin una exposición permanente de la evolución de Yeltsin el constructor a Yeltsin el destructor y traidor.
Cómo tratar a los demás signatarios de este vergonzoso acto antijurídico, lo decidirán por sí mismos los pueblos de las repúblicas hermanas.
Sin embargo, desde el punto de vista de la Mente Cósmica, Rusia, Ucrania y Bielorrusia son una comunidad de pueblos ortodoxos unidos por ideas, objetivos, historia y religión comunes. Después del colapso de la URSS, Rusia dejó de ser un centro unificador y cada república emprendió un viaje independiente a través del turbulento océano de la historia.
Así, como resultado de intrigas, engaños y traiciones, los caminos de los tres estados eslavos, unidos por una historia y un destino comunes, se separaron. Pero este «divorcio» forzado no duró mucho. Pronto veremos: ¡la conexión!
(pravda.ru)
Fuentes:
OLEG GEORGIEVICH. La liquidación de la URSS: ¿no se juzga a los ganadores?