La faceta de Martin Luther King que el establishment nunca te mostró

Ernesto Gutiérrez

Nadie puede negar que el premio Nobel de la Paz se encuentra justamente desprestigiado, por haber sido concedido a personajes responsables de crímenes de guerra y de orquestar golpes de Estado, como el recientemente fallecido Henry Kissinger o el expresidente de los Estados Unidos Barack Obama.

Pero, paradójicamente, con este mismo premio se reconoció también la trayectoria de otros personajes que, con independencia de las diferencias que se pudieran tener con sus concepciones políticas, sí merecen todo el reconocimiento, por su compromiso con la justicia social.

Este es el caso de Martin Luther King Jr., figura icónica en la historia de Estados Unidos y líder destacado en la lucha por los derechos civiles y la igualdad racial, que recibió este premio el 11 de diciembre de 1964. Hace ahora justamente 59 años. 

 Luther King Jr. nació el 15 de enero de 1929 en Atlanta, Georgia, en una época en la que la segregación racial y la discriminación eran la norma en el sur de Estados Unidos. King creció en un entorno religioso y se convirtió en pastor baptista, lo que más tarde influiría significativamente en su enfoque en la lucha por los derechos civiles.

 King se destacó por su liderazgo en el Movimiento por los Derechos Civiles en la década de 1950 y 1960. Su participación en la Montgomery Bus Boycott en 1955, en respuesta al arresto de Rosa Parks por negarse a ceder su asiento en un autobús a una persona blanca, lo catapultó a la prominencia nacional. A partir de entonces, King se convirtió en un líder carismático y persuasivo, conocido por sus discursos poderosos y su defensa de la no violencia.

Uno de los momentos más emblemáticos de la lucha de King fue su liderazgo en la Marcha en Washington por el trabajo y la libertad en 1963, donde pronunció su famoso discurso «I Have a Dream». En este discurso, King expresó su visión de un Estados Unidos donde las personas no fueran juzgadas por el color de su piel, sino por su carácter. Esta visión de igualdad y unidad resonó en todo el país y sigue siendo una de sus contribuciones más perdurables

Sin embargo, el reconocido historiador norteamericano Howard Zinn desvela en su imprescindible obra «La otra Historia de los Estados Unidos» («A People’s History of the United States»), que Luther King no fue solamente un «pacifista» y activista contra la discriminación racial. 

 Howard Zinn y otros historiadores apuntan que la imagen King ha edulcorada y simplificada, por el propio establishment mediático y político de los Estados Unidos, para despojarla de sus aristas más potencialmente revolucionarias.

En su obra, Zinn examina la lucha por los derechos civiles desde una perspectiva más amplia, contextualizándola en el marco de la lucha por la justicia social y económica en Estados Unidos.

Zinn señala que King también abogó por la justicia económica y criticó el sistema capitalista, lo que a menudo se pasa por alto en la narrativa oficial de su vida. King apoyó la lucha de los trabajadores y habló en contra de la desigualdad económicas, lo que a menudo lo colocó en conflicto con las élites políticas y empresariales.

El asesinato

Martin Luther King Jr. fue asesinado el 4 de abril de 1968 en Memphis, Tennessee, a la edad de 39 años, por James Earl Ray. Ray disparó fatalmente a King mientras este se encontraba en el balcón del Motel Lorraine. El asesinato de Luther King fue un evento trágico y conmocionante en la historia de los Estados Unidos y tuvo un profundo impacto en el movimiento por los derechos civiles y en la sociedad en general. Ray fue arrestado, declarado culpable y condenado por el asesinato de King en marzo de 1969. Cumplió una sentencia de prisión hasta su muerte en 1998.

La posible implicación del FBI u otros organismos gubernamentales en el asesinato de Martin Luther King Jr. ha sido objeto de especulación a lo largo de los años.

Pero de lo que no cabe ninguna duda, de acuerdo a los propios documentos oficiales, es de que el FBI, bajo la dirección de J. Edgar Hoover tenía una relación hostil con King y había llevado a cabo actividades de vigilancia e intimidación contra él y el movimiento por los derechos civiles.

El FBI había iniciado un programa de contrainteligencia llamado COINTELPRO (Programa de Contrainteligencia) que tenía como objetivo monitorear y desestabilizar a grupos y líderes considerados subversivos, y el movimiento por los derechos civiles estaba entre los objetivos de este programa.

 King fue objeto de vigilancia y acoso por parte del FBI, lo que incluyó la grabación de sus conversaciones telefónicas y el intento de desacreditarlo públicamente. Sin embargo, no hay evidencia concluyente que vincule directamente al FBI o a otras agencias gubernamentales en el asesinato de King.

La investigación oficial sobre el asesinato de Martin Luther King Jr. fue llevada a cabo por el propio FBI, por lo que no puede resultar extraño que esta concluyera que James Earl Ray «actuó solo en el asesinato».

Fuentes:

https://canarias-semanal.org/art/35389/la-faceta-de-martin-luther-king-que-el-establishment-nunca-te-mostro